• News
    • Celebrities
    • Realeza
    • Sociedad
    • Cine
    • Televisión
    • Música
  • Moda
    • Tendencias
    • Artículos
    • Looks
    • Diseñadores
    • Modelos & Iconos
    • Marcas
    • Complementos
    • Niños
    • Hombres
  • Belleza
    • Cara
    • Cabello
    • Cuerpo
    • Looks
    • Maquillaje
    • Tratamientos
    • Perfumes
    • Celebrities
    • Marcas
    • Hombres
  • Fit
    • Entrenamiento
    • Dietas
    • Nutrición
    • Cuerpo
    • Mente
  • Pareja
  • Padres
    • Alimentación
    • Salud
    • Psicología
    • Educación
    • Ocio
    • Calculadoras
    • Nombres
    • Canciones infantiles
    • Dibujos para colorear
    • Diccionario
  • Cocina
    • Recetas
    • Nutrición y dieta
    • Alimentos
    • Gastronomía
    • Restaurantes
  • Hogar
    • Bricolaje
    • Decoración
    • Jardinería
    • Manualidades
    • Ecología
    • Economía doméstica
  • Salud
    • Medicamentos
    • Enfermedades
    • Cáncer
    • Menopausia
    • Alergias
    • Dietética
    • Vida sana
  • Psicología
    • Terapia
    • Ansiedad
    • Depresión
    • Emociones
    • Coaching
    • Relaciones
  • Mascotas
    • Perros
    • Gatos
    • Peces
    • Pájaros
    • Roedores
    • Exóticos
  • Viajes
    • Destinos
    • Consejos
    • Vuelos
    • Hoteles
    • Guía de Japón
  • Horóscopo
    • Zodíaco
    • Horóscopo chino
    • Tarot
    • Numerología
    • Rituales
    • Test de compatibilidad
Buscar
Última hora Primeras imágenes de la reaparición de Kate Middleton
ADICTO A LOS VIDEOJUEGOS

Mi pareja no para de jugar con videojuegos y no me hace caso: ¿qué puedo hacer?

Mi pareja no para de jugar con videojuegos y no me hace caso: ¿qué puedo hacer?
Noelia Rodríguez Alvarez
Última actualización: 17 Julio 2019
¡Comenta!
Es normal que tu pareja y tu no compartáis los mismos gustos y también es posible que a él le gusten los videojuegos. Sin embargo, si esto llega a ser un problema para vuestra relación tendréis que solucionarlo.

Cuando se tiene pareja es normal no tener los mismos gustos ni querer hacer las mismas cosas en todo momento pero hay veces que las aficiones de uno pueden convertirse en un auténtico incordio, incluso en motivo de discusiones e incluso rupturas. Los videojuegos o la adicción a internet son uno de esos hobbies que pueden poner en peligro la relación cuando la otra persona se siente desplazada por ellos, algo que no debería ocurrir con ninguna afición, ni siquiera con el trabajo. Pero que aún así ocurre.

En el caso de los videojuegos se suele tratar de una experiencia que se disfruta en solitario, en casa y sin apenas interacción con otras personas. Si a ti no te gusta jugar tanto como a tu pareja, incluso ni siquiera te gusta, y ya te has cansado de sentarte a su lado a ver como mata marcianos o libra épicas batallas en internet seguro que te sientes desplazado y lo peor de todo, sin saber qué hacer.

Los videojuegos pueden llegar a ser muy adictivosLos videojuegos pueden llegar a ser muy adictivos

Los videojuegos pueden llegar a ser muy adictivos, especialmente cuando son una novedad o cuando suponen una vía de escape del día a día. Por eso quien los practica no siempre es consciente de que pueden llegar a aislarle y hacer que se separe de quienes le rodean. Si es el caso de tu pareja has de saber que es muy probable que no se dé cuenta de la situación, incluso que crea que todo va bien.

Ábrele los ojos a tu pareja

Deberás ser tú quien le abra los ojos. Y para hacerlo de forma efectiva has de tener un argumento potente y una buena exposición de motivos. No basta una simple rabieta porque probablemente conseguirás lo contrario, que se refugie en los videojuegos tras vuestra discusión.

Estás ante un gran aficionado y ante un problema para vuestra relación si esto sucede. Si te encuentras bien con esta situación, incluso compartes su euforia no hay problema, pero si te sientes desplazado sí.

  • Tu pareja pasa varias horas al día jugando
  • Te ha dado plantón o cambiado vuestros planes por ponerse a jugar
  • Debe comprender que no puede olvidarse de los problemas de la vida refugiándose en los vidoejuegosDebe comprender que no puede olvidarse de los problemas de la vida refugiándose en los videojuegos
  • Estando juntos se conecta a internet para seguir jugando
  • Buena parte de vuestras conversaciones versan sobre su hobbie

Tendrás la sensación de que prefiere pasar el tiempo con personajes de ficción o con otros jugadores que conoce en internet que con su pareja y eso al final acaba por hacer mella en tu autoestima. ¿ Significa que valora más un juego que a vuestra relación ? ¿Es el futuro que os espera? ¿Se puede reconducir la situación?

Si estas cosas te preocupan has de trasladárselas a tu pareja y tener claro qué quieres que cambie. Expón cómo te hace sentir y qué ha de hacer para recuperar la relación porque en estos momentos puedes sentir que ni siquiera formas parte de una. Explícale cómo te deja en segundo lugar y antepone sus ganas de jugar a lo que tú quieres hacer o lo que buscas. Haz que lo vea desde tu perspectiva porque, como comentábamos antes, es muy probable de que ni siquiera sea consciente de que existe un problema.

Convertirse en una adicción

Los videojuegos son un hobby pero en ocasiones pueden llegar a convertirse en una auténtica adicción para quienes se obsesionan con ellos y no ven más allá de la pantalla. No es algo que afecte sólo a este tipo de juegos, sino que ocurre con cualquier entretenimiento llevado al extremo y en este caso con el añadido de que no fomenta la socialización con otras personas, ni siquiera el salir de casa.

Es importante que vea que tanto tú como sus amigos os habéis dado cuenta del problemaEs importante que vea que tanto tú como sus amigos os habéis dado cuenta del problema

Los jugadores tienden a practicar en solitario, recluidos del resto de personas y eso puede hacer que se acaben por aislar socialmente, que dejen de lado a sus amigos -aquellos que no comparten su pasión-. También fomentan el sedentarismo y pueden provocar alteraciones del sueño. Si es lo que le ocurre a tu pareja o crees que puede llegar a ocurrirle has de hacérselo saber y advertirle de la situación, porque puede ir más allá de vuestra relación y a extenderse al resto de su entorno. A la hora de hacerlo si hay más personas presentes que respalden tu argumento le ayudará a ver que no es algo que pienses únicamente tú, que incluso puedes exagerar, sino que es una realidad de la que se han dado cuenta más personas.

Es muy probable que el propio afectado no se diera cuenta de la situación, pero al ser consciente quiera ponerle remedio. No hay necesidad de que abandone por completo los videojuegos pero sí que sepa repartir el tiempo entre sus hobbies, vuestra relación y el resto de su vida. Si es así habréis resuelto la crisis y lo que es aún más importante: habréis salido reforzados como pareja.

Tu pareja no quiere cambiar

Pero también puede darse el caso contrario, que tu pareja no quiera cambiar. Puede que no vea que tiene tanta dependencia de los videojuegos como tú crees o que considere que son una parte muy importante de su vida, incluso que vuestra relación está bien tal y como está. Si es así entonces es el momento de que tú tomes una decisión.

Puedes optar por decidir seguir juntos, esperando a que llegue un momento en que cambie de opinión o tú te amoldes a su hobby. Puedes tratar de interesarte por los videojuegos y convertiros en una pareja de jugadores. Probablemente eso ya lo hayas intentado y esperar a que una persona cambie, especialmente cuando ha dado muestras de no tener la menor intención de hacerlo, es en la mayor parte de los casos una pérdida absoluta de tiempo.

Si no te gustan los videojuegos es una tontería que intentes ser su compañera de juegosSi no te gustan los videojuegos es una tontería que intentes ser su compañera de juegos

Además, el hecho de que no querer hacer ningún cambio te está demostrando que no se preocupa por la relación tanto como lo haces tú. ¿Crees que te compensa seguir con una pareja así? ¿Ves que tengáis futuro? Puede que debas ser tú quien dé el paso y poner fin a lo vuestro. Si sientes que no te hace caso, no se preocupa por cómo te sientes ni lo que piensas, qué motivos tienes para seguir juntos. No hay necesidad de que pierdas el tiempo con una relación que no va a ninguna parte y te hace sentir mal.

Artículos recomendados